Soy migrante. Llegué indocumentado, esperé más de 25 años para ser ciudadano y en ese tiempo trabajé, emprendí y salí adelante.
He visto cómo las injusticias de ambos partidos políticos afectan a nuestra gente.
Por eso hoy levanto la voz: no como político, sino como servidor público auténtico, comprometido a representar a los latinos sin estar vendido ni comprado.
Aquí comparto nuestras historias, porque sé que el voto latino hará la diferencia.